Desde fines de 2016, el maestro Gonzalo Venegas se ha dedicado a formar y enseñar junto a un grupo de profesores, a la Orquesta Infantil y Juvenil de la Corporación La Matriz, que la próxima semana, brindará dos conciertos donde mostrará sus impecables avances.
Los días martes y viernes son jornadas especiales en las oficinas de la Casa Parroquial de La Matriz, que ofrece sus espacios a las diferentes iniciativas que la Corporación La Matriz realiza por y para la gente del Barrio Puerto de Valparaíso.
Uno de los proyectos más destacados, ha sido la creación y el desarrollo de la Orquesta Infantil y Juvenil de la Corporación. Una iniciativa artística que reúne a alrededor de 40 niños, niñas y jóvenes en riesgo social del sector, quienes a través de la música demuestran cómo el arte puede ser un motor para el desarrollo social.
Uno de los artífices de la Orquesta ha sido el profesor Gonzalo Venegas, quien dirige la agrupación de jóvenes músicos y quien no oculta una profunda satisfacción por el continuo avance de los niños en un proyecto que, estima, «demuestra que el arte debe ser de todos y para todos».
– El 2018 ha sido un avance significativo en la Orquesta Infantil y Juvenil de La Matriz ¿Cómo ves hoy a quienes forman parte de esta querida agrupación? ¿Qué cambios se han podido ver desde sus inicios en 2016?
– El avance es absolutamente destacable, sobre todo en un grupo de chicos que vienen de una nula experiencia musical, como nosotros la entendemos. Ahora, se ha visto que en sólo un par de años, e incluyendo a los chicos que se incorporaron este año, el crecimiento ha sido muy interesante. A nivel musical ha sido importantísimo y creo que también los cambios se van a ir dando conjunto con la vida de nuestros músicos, que están en su mayoría entrando a la adolescencia. Cada mes, cada ensayo, uno va observando cambios que, sumados, son grandes avances.
– ¿Cómo va el proyecto iniciado este año con los chicos de la orquesta?
-Va en un excelente pie en lo musical, va consolidándose en el Barrio y la comunidad está hablando mucho sobre él. Es un proyecto emblemático dentro de la Corporación La Matriz y este año ha sido muy positivo ya que se han dado las cosas de buena manera. Evidentemente hay temas que hay que seguir desarrollando, como la búsqueda de auspicios o patrocinios, y en eso se está trabajando, al fin y al cabo. Estamos esperando que haya gente que quiera colaborar con este proyecto para seguir creciendo. Hoy por hoy, el lugar de ensayos ya nos está quedando chico, por eso la urgencia pasa por tener un lugar de ensayos para la Orquesta.
– ¿Los jóvenes han sentido la experiencia de poder tocar en escenarios de relevancia durante este año? Valga decir, lo que pasó este año en el BarcelonaDocs, en diferentes iglesias, en la Cena de Aniversario…
– Desde este año hemos tenido más instancias de colaboración y de presentaciones en lugares que se pensaron para que los chicos estuvieran muy seguros y que pudieran adquirir experiencia. No es menor, tuvimos el DocsBarcelona que fue un hito para muchos, pero también tuvimos conciertos en el Salón de Honor de la PUCV, el concierto en la Iglesia Anglicana. Hace poco hicimos un concierto en el Mall Paseo Ross, que quizás no sea el lugar indicado para una presentación de este tipo, pero creo que fue muy bueno para mostrar a la comunidad nuestro trabajo.
Ahora se vienen dos conciertos de Navidad, uno en nuestra «sede», que es la Iglesia de La Matriz, y después en la Iglesia Presbiteriana. Han sido espacios valiosos para dar cuenta de todo lo que hemos hecho en estos dos años.
– ¿Cuáles son los proyectos que tiene a futuro nuestra querida Orquesta? ¿Cuáles son sus necesidades para poder cumplir con ellos?
– El desafío para 2019, sin dudas, es consolidar lo que tenemos y seguir creciendo. Hoy tenemos un sueño que hay que trabajar con dedicación, entendiendo que todo avance también tiene un cariz que pasa por un tema económico. Estamos buscando apoyos que nos permitan seguir trabajando tal como ahora, respaldo de empresas, privados o proyectos para materializar estos sueños. Más implementación, comprar más instrumentos, mejoras que permitan que los profesores tengan más horas de clases. Nos encantaría lograr en un par de años tener una Orquesta Sinfónica, con un programa de más de 60 niños que sería un sueño.
– ¿Se ha visto el compromiso de las familias de los niños reflejado en la labor que se realiza en la orquesta? ¿Cómo ha sido el vínculo con los apoderados de los niños durante 2018?
– Las familias son parte vital de este proyecto, y el apoyo que necesitamos de ellas es fundamental en términos de que son quienes se preocupan por ellos, los vienen a dejar y a buscar. Las relaciones con los apoderados son muy buenas. El éxito del proyecto reside en esa conexión y el apoyo mutuo entre los niños, los profesores y las familias enteras. No siempre son los papás, a veces son hermanos, tíos, abuelos quienes cooperan y colaboran, además de apoyar cuando se les pide. Son cosas en las que hay que avanzar, para comprender hacia donde va el proyecto y a dónde nos dirigimos.